El ‘Royal Maundy Service’ se celebrará el 14 de abril en la capilla de San Jorge tras dos años sin llevarse a cabo debido a la pandemia
Isabel II vuelve a perderse una de sus citas más importantes. La reina de Inglaterra no asistirá al servicio religioso de Pascua que se celebrará el próximo 14 de abril, Jueves Santo, en la capilla de San Jorge en el Castillo de Windsor, tal y como han informado desde el Palacio de Buckingham este viernes. La monarca, que será la quinta vez que no esté en sus 70 años en el trono, ha pedido a su hijo, el príncipe Carlos, y a la esposa de este, la duquesa de Cornualles, que la representen, por primera vez, en el tradicional Royal Maundy Service. Un evento que vuelve a llevarse a cabo tras dos años sin poder realizarse debido a las restricciones sanitarias impuestas por la pandemia provocada por el coronavirus.
En un principio, y tras estar presente en el homenaje por el duque de Edimburgo que tuvo lugar el pasado 29 de marzo en la Abadía de Westminster, se esperaba que Isabel II estuviera en el servicio religioso, pero finalmente no será así. Por su estado de salud, la reina de Inglaterra, de 95 años, no ha podido asegurar su asistencia con tanta antelación. Cabe recordar que en el funeral del príncipe Felipe se confirmó que estaría en el último momento, y ha preferido tomar esta decisión por temas de organización, ya que la orden del servicio se imprimía en el día de ayer viernes 8 de abril. La soberana ha querido que se puedan llevar a cabo todos los preparativos y que no haya nada que pueda ensombrecer ese día.
El evento de la próxima semana es una ceremonia tradicional de la Iglesia de Inglaterra que se realiza el Jueves Santo. Se trata de un servicio religioso al que, generalmente, asiste la Reina, en el que visita una abadía, catedral o iglesia de Reino Unido para premiar y reconocer su labor durante todo el año. Al acabar la ceremonia distribuye unas monedas acuñadas especialmente para la ocasión, conocido como el ‘dinero de Maundy’, a las personas que lo merezcan y que, normalmente, son algunos de los asistentes recomendados por su servicio a la Iglesia y la comunidad local.
Desde el pasado mes de octubre la soberana arrastra algunos problemas de salud y sus intervenciones públicas se han reducido al máximo, sobre todo, tras su positivo en covid el pasado 20 de febrero. No es la primera cita importante que la monarca se ha perdido en las últimas fecha. No pudo estar presente en las celebraciones por el día de la Commonwealth, por primera vez en una década. Isabel II está dosificando mucho sus apariciones públicas. Sin embargo, no ha disminuido su actividad en lo que se refiere a la audiencias virtuales y compromisos desde el Castillo de Windsor. A principios de esta semana, la soberana inauguró la Unidad Queen Elizabeth en el Royal London Hospital, al este de la capital, a través de un enlace de video.