Afirman que Tianguis Turístico es «señal de compromiso» y piden plan trasexenal que integre problemas de la población.
La recuperación mínima de la actividad turística en Acapulco tardará hasta 10 años a pesar de los esfuerzos y planes de integración que han hecho entre el gobierno federal y el sector privado, según estimaciones de la agrupación de especialistas «México Cómo vamos».
«El que haya pocos hoteles grandes que puedan reconstruirse no significa que se vaya a reactivar la actividad económica del puerto, escuchando testimonios de distintos grupos empresariales y gremios turísticos del estado se asegura que va durar entre cinco y 10 años la recuperación mínima básica para que haya otra vez turismo (…) esto va a abarcar el último año de este sexenio, el próximo, y un pedazo más del siguiente», expresó para MILENIO, Sofía Ramírez Aguilar, directora general de la agrupación.
Añadió que la integración del tianguis turístico en Guerrero es una señal de compromiso del gobierno, pero aún hace falta ver qué tanto se traduce eso en un plan viable transexenal, pues resaltó que la entidad solo dependen del turismo informal a diferencia del turismo formal que está establecido en la península de Yucatán y Baja California que pudieron recuperarse rápidamente tras la pandemia.
Además, la mayoría de los hogares en Guerrero, antes del paso de Otis, ya tenían techos de madera, ingresos menores de origen, mal acceso a salud, sin accesos básicos o sistema financiero, que son las capas que agravan la situación para la población.
«La gran lección de la pandemia es que con un choque externo la resiliencia y la capacidad de la reconstrucción viene de la capacidad que ya se tenía de origen, el golpe de Otis sin duda fue brutal y tuvo una doble afectación, primero, Guerrero era un estado que no estaba recibiendo las inversiones públicas que si estaba recibiendo el resto del sur sureste, ya que las inversiones para el corredor transístmico se acaban en Guerrero, Veracruz, Tabasco y Oaxaca», añadió.
Destacó que las carencias de Guerrero, principalmente en la cuestión económica, de seguridad y calidad de vida han propiciado que su población sea menor, por las migraciones.
«Es un escenario muy difícil de reconstruir, pero es una buena oportunidad para que, como país y estado, se haga una intervención coordinada entre el sector privado y el público para que esto pueda avanzar», enfatizó.
Según el Índice de Progreso Social de México 2015-2022 presentado por México Cómo Vamos, Guerrero es la entidad con el mayor Producto Interno Bruto (PIB) per cápita bajo, con 83 mil 209 millones de pesos, y muestra debilidades en el tema de nutrición, salud, no hay acceso al agua, falta de una vivienda digna y títulos de propiedad, no hay seguridad social, mal acceso a la educación, entre otros problemas.