El presidente del club dice que la decisión la tomó la FIBA unilateralmente y teme por la seguridad de su equipo
El presidente del Hapoel Holon, Eitan Lanciano, declaró que la decisión de la FIBA de albergar los partidos del equipo en Atenas es unilateral y que el equipo no jugará allí aunque se viera obligado a hacerlo. Lanciano atacó a la FIBA por su negativa a reconocer a las víctimas de la guerra en Israel desde el principio y opinó sobre el supuesto regreso de la Liga de Baloncesto israelí.
El presidente del Hapoel Holon, Eitan Lanciano, declaró que la decisión de la FIBA de albergar los partidos del equipo en Atenas es unilateral y que el equipo no jugará allí aunque se viera obligado a hacerlo. Lanciano atacó a la FIBA por su negativa a reconocer a las víctimas de la guerra en Israel desde el principio y opinó sobre el supuesto regreso de la Liga de Baloncesto israelí.
«Se pidió a la Asociación Israelí de Baloncesto que ayudara a los equipos de Israel, no sólo a nosotros, y se puso en contacto con todo tipo de asociaciones de Europa. En aquel momento, la Federación Griega fue la única que consideró y aceptó hacerse cargo de la organización y la seguridad. Eso fue todo. La FIBA emitió inmediatamente un comunicado en el que decía que jugaríamos en Ano Liosia sin que nadie nos preguntara ni se interesara por nuestra opinión», explicó el Lanciano.
El Hapoel está integrado en el grupo F de la Champions esta temporada y sus rivales en esta fase de grupos son Telekom Bonn, Río Breogán y el Bursaspor turco. Precisamente el próximo partido del equipo israelí como local, fijado en Atenas, es ante el Breogán de Lugo, el próximo martes día 14.
El 1 de noviembre, la FIBA anunció que el Hapoel Holon jugaría sus partidos como local en la BCL en el pabellón olímpico Ano Liosia del AEK Atenas. Desde la Federación Internacional se asegura que la decisión se tomó «conjuntamente».
«El AEK intentó ser amable con todo el mundo e inmediatamente emitió su propio mensaje, en el que recordaba a los aficionados que ha apoyado a los palestinos durante años. Estoy seguro de que a la mayoría del público no le interesa esta situación, pero como ocurre en otros lugares, suena la voz de los militantes», declaró Lanciano. «Eso es lo que oímos. No hubo ninguna conexión directa entre los dos clubes, y no se dijo ni una palabra entre nosotros.»
De hecho, el AEK de Atenas sí emitió un comunicado oficial en el que el club destacaba su apoyo a los refugiados, nombrando múltiples casos en los que el club ayudó tanto a aficionados como a equipos palestinos.
Numerosos aficionados del AEK tomaron represalias contra la decisión de la FIBA de celebrar los partidos del equipo israelí en la cancha de su club favorito. La temporada pasada el club griego fue sancionado con una severa suspensión por la BCL tras los ataques a seguidores israelíes cuando el Hapoel Bank Yahav Jerusalem jugó allí un partido.
«En cuanto me enviaron todos los mensajes de enfado de los griegos, y desde luego, después de lo que le ocurrió en esta cancha al Hapoel Jerusalén la temporada pasada, ya lo dije la semana pasada: ‘Aunque nos obliguen, no, no jugaremos allí'», declaró Lanciano.
Preguntado por cómo y por qué la FIBA anunció la decisión de albergar los partidos del Holon en Atenas, Lanciano no supo responder.